Salimos el 28 de mayo de 2011, sobre 17,oo horas. La etapa que más granizo y truenos hemos tenido, fue increíble. Empezamos con mucho calor pegajoso y bochornoso que duró unos quince minutos. Vamos dejando Emerita Augusta por la avenida Vía de la Plata, las señales nos van indicando el camino, hasta salir de la ciudad. Llegamos a una rotonda donde hay que girar a la izquierda, por la carretera EX-209 en dirección a Montijo y Badajoz. Ahí empezó los truenos y la lluvia. Nos pudimos resguardar en el único local que había en las inmediaciones: un bar. (Santiago no hechó un capote).
Unos quinientos metros más adelante, a mano derecha, se coge la carretera del embalse de Proserpina. Caminamos por el arcén, pasamos sobre la autovía y seguimos ascendiendo hasta un cruzeiro de piedra donde nos espera un tramo de bajada hasta la glorieta de Proserpina. Pasamos la urbanización para llegar a la presa romana. Al salir del entorno de la presa cogemos de nuevo la carretera y continuamos por ella durante más de dos kilómetros y medio. Empieza a granizar, tenemos que seguir por que no tenemos nada para resguardarnos. El paisaje está rodeado de encinas. En el Km 10,oo de la etapa nos salimos del asfalto, para coger el camino algo desdibujado hasta otro más ancho, delimitados por dos vallas de finca de caza. En media hora entramos por la calle Camino de Santiago en Carrascalejo. Ha dejado de llover y granizar. Dejamos el pequeño pueblo buscando el túnel bajo la autovía que está decorado con dibujos santiaguistas. Lo atravesamos buscando el alto, donde se levanta una Cruz de Santiago, en breve llegamos a Aljucén. Son las 20,00 horas. Sellamos la credencial y dormimos en el albergue Annalena.
Dibujos santiaguistas
Equipamiento para la lluvia
Cruz de Santiago con Aljucén al fondo
Aljucén
Altitud:
MÉRIDA: 210,00 metros. ALJUCÉN: 270,00 metros
Pueblos y Aldeas:
MÉRIDA; EL CARRASCALEJO; ALJUCÉN
Incidencias:
Como hemos comentado anteriormente la etapa tuvo de todo: calor, lluvia, granizo, truenos y eso que era corta. Tuvimos unas de las anécdotas más sorprendente del camino, nos confundieron con un matrimonio.
Confusión en el Albergue