Etapa 23: ZAMORA-RIEGO DEL CAMINO 36,50 KM

Salimos el 28 de octubre de 2011, sobre las 8,00 horas, mañana muy fría. La salida por la plaza Mayor, a la derecha del Ayuntamiento de Zamora. Cogemos la calle Costanilla para bajar a continuación por la calle Feria. Llegamos así a una rotonda. Ojo con las señales del camino, en este punto, pues una señal nos indica para la izquierda (camino Portugues) y otro señal igual que la anterior nos indica de frente (vía de la Plata). A nosotros Santiago nos hecho un cable en este punto, pues un señor antes de llegar a la rotonda nos pregunto a donde íbamos y nos informó de los dos itinerarios que había. Seguimos de frente por la calle Puebla de Sanabria. Después subimos por la cuesta de la Morana y la Avenida de Galicia hasta llegar a una rotonda. Aquí no hay que seguir la N-630 sino girar a la izquierda en dirección a la Hiniesta. Cogemos esta carretera, la ZA-990, donde está la cruz del Rey Don Sancho, andamos unos kilómetros para girar a la derecha por una pista. Caminamos ahora junto a una escombrera aunque por poco tiempo, ya que más adelante se despeja la pista y podemos ver una extensa llanura donde se cultiva el trigo. Después de una pequeña bajada hay que girar a la derecha en el cruce de caminos, al encuentro de la inseparable N-630. A unos quince metros llegamos a la entrada de Roales del Pan.

Nos recibe un cruceiro y las figuras, a escala real de un belén artesanal realizado por un vecino del pueblo. Tenemos mucho frío, el gorro está blanco del contraste del frío exterior y el sudor que desprende la cabeza. Atravesamos el pueblo para coger otra pista completamente recta y paralela a la N-630, que nos lleva en una hora y media más tarde a las inmediaciones del pueblo de Montamarta. Es el kilómetro dieciocho de la etapa de hoy. Pasamos junto a la iglesia de San Miguel Arcángel. A sus pies se encuentra una escultura dedicada al Zangarrón, una máscara ancestral cuyo papel se encargan de representar los quintos los días de Año Nuevo y Reyes. Salimos del pueblo buscando la ermita de la Virgen del Castillo. Antes de llegar a la ermita, bajamos hasta la cola del embalse de Ricobayo, tiene que ser muy bonito el paisaje del embalse cuando está con agua, pero al pasar nosotros estaba seco debido a la sequía de este año. Dejamos a la izquierda la ermita para llegar a una pista, subimos por  un repecho de unos cientos de metro y continuamos recto casi media hora, con la referencia  de la N-630 a nuestra derecha, y después cruzamos una cadena de finca privada para subir un pequeño tramo rodeados de encina. Acto seguido giramos a la derecha, para bajar a la N-630 para cruzarla. Seguimos por un camino paralelo a la nacional, que nos lleva a un cruce de carretera, a la izquierda Puebla de Sanabria y a la derecha Benavente. Cogemos la derecha para llegar a una loma que domina el embalse de Ricobayo. Bordeamos el embalse, para buscar el puente de la nacional que salva las aguas. Pasamos junto a las ruinas de Castrotorafe, importante cuidad del siglo XI que custodiaba el puente sobre el río Esla. El camino no entra en el recinto pero esta ciudad medieval merece al menos una breve visita. Dejamos atrás las ruinas y en algo más de un kilómetro llegamos a Fontanillas de Castro. Cogemos el arcen de la N-630 y en tres kilómetros llegamos al final de la etapa de hoy. Riego del Camino, son las 14,50 horas. Sellamos la credencial en el albergue. 

                                                                                              Amanecer en los alrededores de Zamora

                                                        Toro                                                                        Atardecer en Toro                                                            Zamora