Etapa 24: RIEGO DEL CAMINO-BENAVENTE 37,00 KM

Salimos el el 30 de octubre de 2011, sobre las 7,30 horas (cambio de hora). La salida de Riego por la nacional, en unos metros giramos a la izquierda para coger un camino, paralelo a la N-630. En poco menos de una hora llegamos al cruce de la carretera que se dirige al monasterio de Moreruela, seguimos recto para llegar a la Granja de Moreruela. En este pueblo tenemos dos opciones, continuar por la Vía de la Plata en dirección a Astorga o por el Camino Sanabres, que atraviesa la comarca de Sanabria, entra en Orense y sigue ya por tierras gallegas hasta Santiago de Compostela. Nosotros seguimos por la Vía de la Plata. Detrás de la iglesia se encuentra las señales en un poste donde se bifurcan los Caminos. Cogemos por la calle San Juan y las Bodegas para salir a un camino que seguimos unos cientos de metros hasta una antena. Giramos a la derecha para en unos metros, girar a la izquierda y coger el camino que nos lleva en paralelo con la  nacional, que se encuentra a unos trescientos metros a nuestra derecha. El camino es una larga recta de unos dos kilómetros que va a parar a la carretera que se dirige a Tábara. Al llegar a ella giramos a la derecha  buscando la compañía de la N-630. Unos metros a la izquierda de la carretera nacional hay un camino que transita siempre en paralelo y por el que continuamos hasta llegar Santovenia del Esla.

La localidad se atraviesa por la carretera y después de pasar la iglesia de Nuestra Señora del Tovar encontraremos a la derecha una singular fuente de tres caños y abrevadero. Detrás de ella cogemos  un camino que llega, tras pasar sobre el arroyo de Prado Ramiro y un corto repecho, hasta el cementerio situado al bordo de la n-630. En los próximos seiscientos metros continuamos junto al arcén derecho de la carretera. Una flecha amarilla nos obliga a cruzarla y a seguir otros cientos de metros por un camino al otro lado de la nacional. Tras este baile llegamos a Villaveza del Agua por el arcén y por una pequeña senda junto a una acequia que nos evita el asfalto. 

Cruzamos Villaveza por la nacional y antes de llegar al final del pueblo, las flechas nos obliga a girar a la izquierda. Este camino nos lleva directamente hasta el cercano pueblo de Barcial del Barco, donde destaca la torre octogonal de la iglesia de Santa Marina. El pueblo se atraviesa por la carretera, para dirigirnos a las inmediaciones del cementerio. Donde tenemos dos opciones para  llegar a Benabente: La más corta es ir por la vía del ferrocarril Zamora-Astorga que lleva muchos años en desuso. El problema es la maleza, los nativos de Barcial nos recomiendan la segunda opción, cogiendo por Castropepe y llegando al final de la inseparable N-630. Llegamos a un cruce de carreteras la N-630 desemboca como si fuera un río en la A-6. La autopista del Noroeste, dando un rodeo de cuatro kilómetros, para enfilar una larga recta hasta llegar a las inmediaciones de la Azucarera Ebro, con su vistosa torre. Pasamos junto a ella y en poco más de diez minutos llegamos a la entrada de Benabente. Para llegar al albergue tenemos que cruzar todo el pueblo y buscar la antigua estación del tren hoy día es el albergue municipal, son las 15,30 horas. Sellamos la credencial dos horas más tarde en las oficinas de la policía local.

                                                                                                                                                               Cruces del Camino de Santiago                                                Torre Octogonal en Barcial del Barco            

                                                                                                                    Símbolo de España

Altitud:

RIEGO DEL CAMINO: 705,00 metros; BENAVENTE: 705,00 metros.

Ciudades y Aldeas:

RIEGO DEL CAMINO, GRANJA DE MORERUELA, SANTOVENIA DEL ESLA, VILLAVEZA DEL AGUA, BARCIAL DEL BARCO, CASTROPEPE, BENAVENTE.

Incidencias:

Otra etapa trampa, tuvimos que andar cuatro kilómetros más de lo previsto en el libro de ruta, pero eso no fue lo peor. El problema era que veíamos Benabente por su parte sur y tuvimos que dar un rodeo y entrar por su parte  norte. La ciudad es grande y muy bonita, es un cruce de caminos en todas sus vertientes. El albergue deja mucho de desear, estaba todo desordenado y mal cuidado, sin embargo solo llevaba un año restaurado.(Debe de ser la crisis)  

                                                     Escultura del Toro de cuerda                                                      Cena del Peregrino